Metabolismo mineral y estatus mineral del ganado lechero alimentado con suplementos minerales ajustados
Stéphane Durosoy1, Boubacar DIALLO TELLY1, Stéphane DUROSOY1, Anne BOUDON2
(1)-Animine SAS (2)-INRAe UMR PEGASE
Se seleccionaron cinco
rebaños lecheros, con un promedio de 89 vacas lecheras, en el sureste de
Francia. Todos los ingredientes de las dietas basales, incluidos los forrajes,
se recolectaron mensualmente y se analizaron mediante ICP-AES (espectroscopia de emisión atómica con plasma
acoplado inductivamente) para determinar el contenido de Zn, Cu, Mn,
S, Mo y Fe. Durante 6 meses, las vacas fueron alimentadas con nuevos alimentos
minerales suplementados con Zn potenciado (HiZox®), Mn purificado (ManGrin®) y
Cu monovalente (CoRouge®) de Animine Precision Minerals (Annecy, Francia). Las
dietas se formularon por granja, para proporcionar 80 y 70 mg/kg de MS para Zn
y Mn, respectivamente, en función de la dieta total (+11% y -20% de Zn y Mn
suplementados en promedio). Dependiendo del nivel de antagonistas de Cu en la
dieta basal (S, Mo y Fe), el Cu total objetivo fue en promedio de 11,7 mg/kg de
MS (-50% en promedio de Cu suplementado). En cada granja, se recolectaron
muestras de sangre 3 veces en el 10% de los animales (n=47; M0=inicio, M3=3
meses y M6=6 meses después del inicio de la prueba) y se analizaron las
concentraciones de Zn, Cu y Mn, así como la actividad de la SODe (enzima superoxydes dismutases) y de la ceruloplasmina. Los efectos de los nuevos alimentos minerales se
exploraron a través de ANOVA integrando en el modelo estadístico el tratamiento
(M0 vs M3 vs M6) y la granja como efectos fijos y la vaca ubicada dentro de la
granja como un efecto aleatorio. El Zinc en plasma aumentó significativamente
(P=0.000; M6 > M3 > M0; +21%) mientras que el Cu en plasma se mantuvo con
los nuevos alimentos minerales (P=0.079; 13.65 µmol/L en promedio). No se
observaron diferencias estadísticas con respecto al Mn en plasma para M0 y M6,
sin embargo, M3 fue significativamente menor (2.92, 2.82 y 1.96 µg/L
respectivamente). La falta de
respuesta se debe a que el análisis de sangre no es el método de referencia
para evaluar el estado micro-mineral de los animales, debido a la baja
sensibilidad de este método. El hígado sería el mejor indicador, pero dado que
requiere la sacrificio de los animales, no se utilizó en esta prueba. La actividad de la ceruloplasmina aumentó significativamente en M3 en
comparación con M0 (P=0,001; 7628 vs 5708 mU/mL). No se observaron diferencias
estadísticas con respecto a la actividad de SODe (P=0,135). Estos resultados demostraron que el
metabolismo y el estatus mineral del ganado lechero pueden mantenerse
adecuadamente mediante suplementos minerales ajustados a los niveles de Zn, Cu
y Mn.