Caso clínico: intoxicación por nitratos y nitritos en bovino de carne

Cristina Baselga¹, Sebastián Samus¹, Gonzalo Fernández², Gema Chacón¹

(1)-Exopol SL (2)-Veterinario clínico

Introducción

La intoxicación por nitratos o nitritos en ganado vacuno ocurre cuando los animales consumen alimento o agua con altos niveles de nitratos y esta contaminación suele estar relacionada con el uso de fertilizantes o productos químicos en los cultivos o a la filtración de estos productos a pozos o aguas subterráneas que se utilizan para agua de bebida.

Sin embargo, no siempre el nivel alto de nitratos en las plantas forrajeras ocurre debido a la acción humana, sino que hay épocas en las que los forrajes pueden alcanzar concentraciones elevadas de nitratos de manera natural. Esto ocurre en ciertas especies forrajeras como avena, centeno, maíz, girasol o sorgo que cuando se dan unas condiciones climatológicas favorables y en suelos ricos en nitrógeno, acumulan mayor cantidad de nitrato, principalmente en la parte inferior del tallo.

Los signos clínicos y lesiones que se observan en un rumiante intoxicado por nitratos o nitritos se deben a la hipoxia tisular. Los nitratos en el rumen son metabolizados en nitritos, los cuales atraviesan la pared del tracto digestivo y en el torrente sanguíneo se unen a la hemoglobina y la transforman en metahemoglobina, que es incapaz de transportar oxígeno.

Debido a la disminución de hemoglobina libre en el torrente sanguíneo la sangre sufre un cambio de coloración, pasando de rojo intenso a rojo oscuro o marrón achocolatado, y las mucosas se observar de color oscuro y cianóticas. El curso de la intoxicación es agudo y los animales muestran signos inespecíficos como debilidad, ataxia, disnea, taquipnea, taquicardia, temblores musculares y aumento de la frecuencia urinaria, aunque en muchas ocasiones los animales mueren de manera súbita sin manifestar signos previos. Las lesiones que se observan al realizar la necropsia son petequias en las serosas de los órganos y mucosas cianóticas.

Descripción del caso clínico

En primavera del 2024 en una ganadería de bovino de carne de 80 reproductores ubicada en los valles pasiegos aparecen dos vacas y un toro muertos de manera súbita. Los únicos síntomas observados el día anterior a la muerte fue que una de las vacas abortó y ambas mostraban disuria y arqueo al orinar y estaban intranquilas.

En la necropsia de una de las vacas se observaron hemorragias en la serosa de la mayor parte del yeyuno con contenido gaseoso en su interior. Los primeros tres estómagos presentaban contenido digestivo pero el abomaso estaba vacío. Al revisar el rumen se observó la mucosa de un color azul intenso. Las muestras recogidas para enviar al laboratorio fueron hígado, riñón, intestino delgado, rumen y contenido ruminal.

El veterinario clínico decidió enviar muestras de forraje al laboratorio ya que el único cambio que hubo en los días previos a la aparición de las bajas fue la introducción de un forraje de avena en la ración.

Ante la sospecha de una intoxicación por nitratos se analizó la muestra de forraje y de hígado mediante la técnica de espectrofotometría. En el forraje se detectó una concentración de nitratos de 10.190 ppm, siendo compatible con una intoxicación aguda ya que triplica el límite de tolerancia en los animales, 3.000 ppm. La búsqueda de nitritos en el hígado confirmó la intoxicación en el animal pues se detectó 39.6 ppm, que supera el valor de tolerancia de 0.5 ppm.

 

Discusión

La aparición repentina de 3 bajas en el rebaño ocurrió 2 días después de suministrarles una nueva partida de heno de avena. En el diagnóstico diferencial inicial se incluyeron enfermedades infecciosas como una clostridiasis o una infección bacteriana generalizada, sin embargo, por las lesiones observadas se descartaron estas causas. También se tuvieron en cuenta otras intoxicaciones como la de pesticidas o plantas tóxicas, pero no había signos clínicos ni lesiones compatibles.

En el año 2023 hubo una sequía generalizada en todo el territorio español ya que la temperatura media anual fue más alta y las precipitaciones, más bajas que las de otros años. El forraje suministrado a los animales presentaba un mayor porcentaje de tallos verdes que años anteriores.

Estas características climatológicas del año de la cosecha de aquel forraje junto con la coloración azul de la mucosa ruminal hicieron que se planteara la intoxicación por nitratos como diagnóstico presuntivo, a pesar de no observar las lesiones típicas de sangre de color achocolatado y mucosas cianóticas.

El estudio laboratorial fue la clave para confirmar el diagnóstico presuntivo gracias a la detección de niveles muy elevados de nitratos y nitritos en el heno y en el hígado, respectivamente.

Moléculas detectadas	Resultados	Límite de tolerancia
Nitratos en forraje	10.190 ppm	≤3.000 ppm
Nitritos en hígado	39,6 ppm	≤0,5 ppm